Como Asesora de Imagen Corporativa me toca acompañar a mis clientes en la elección del diseño, color, telas y texturas de sus uniformes institucionales.
Es una parte muy interesante de mi trabajo, porque me permite no solo conocer más a las empresas, si no también a quienes llevarán el uniforme, ya que siempre iniciamos con una breve encuesta sobre su opinión sobre el uniforme actual y qué esperarían o buscan en un uniforme. Su feedback definitivamente es fundamental.
Pero hoy quiero contarles un poco, de las excelentes razones y beneficios que se esconden detrás del uso del uniforme.
Marca Corporativa
Si elegimos el uniforme ideal podemos comunicar a través de él la marca corporativa de una empresa. No es necesario que el uniforme lleve los colores del logos para conseguirlo. A través del diseño, del corte de las prendas, del estilo, etc., el uniforme puede transmitir al público sus valores, su personalidad y demás atributos corporativos.
Uniformidad
Si, ya se que es redundante, pero es importante mencionarlo. El usar uniformes le permite a la empresa estar en mejor control de la imagen de sus colaboradores. Cuando no hay uniforme, las personas usan sus propias prendas y queda muchas veces a la interpretación y posibilidades de cada uno de ellos lo que usan para trabajar. Muchas veces cuando el código no es claro o cuando los colaboradores interpretan a su mejor juicio los mismos, pueden terminar dando una imagen diferente a la que la empresa quisiera transmitir.
Crea Identidad
Para los colaboradores, les crea un sentido de pertenencia e identidad con su empresa. El usar uniforme en muchos casos incluso aumenta la lealtad de los mismos, sobre todo cuando el uniforme forma parte de toda una estrategia bien estructurada y planeada.
Además también fomenta la unidad y el trabajo en equipo. Muchos estudios aseguran que cuando nos vestimos de la misma forma que los demás compañeros, genera el sentimiento de igualdad y unidad, lo que fomenta la colaboración, buenas relaciones y trabajo en equipo.
Identificación
Permite además a los clientes identificar rápidamente quién o quiénes son las personas a quien dirigirse para una atención y además les da la seguridad y confianza que están siendo atendido por personal de la empresa y no un extraño.
Aumenta la Productividad
Muchos expertos indican que tomar pequeñas decisiones todo el tiempo, como pensar qué ponerte todos los días para ir a trabajar, crea una “fatiga de la decisión”, lo que impide que estemos más predispuestos a tomar decisiones más importantes. Por eso, el usar uniforme le quita a los empleados esa fatiga y conlleva al aumento de la productividad.
Ahorro
Definitivamente para los colaboradores usar uniforme significa un enorme ahorro de dinero y tiempo. No tendrán que destinar parte de sus ingresos en comprar prendas para ir a trabajar y ahorrarán además tiempo, no solo pensando qué ponerse diariamente, sino en realizar dichas compras. Esto puede significar en un incentivo salarial para un gran número de trabajadores.
Definitivamente, el uso de uniforme no aplica a todas las empresas ni tampoco a todos los colaboradores. La empresa tendrá que evaluar si en su giro de negocio y sus actividades considerar el uniforme puede ser beneficioso o no, ya que definitivamente implica una inversión importante.
Lo que sí recomiendo siempre es no solo pensar en un uniforme que beneficie a la empresa, sino sobre todo a los colaboradores. Ellos deben sentirse a gusto, cómodos y claramente identificados con el mismo, por eso es que como les comentaba, siempre recomiendo realizar actividades con ellos que nos permitan recibir un feedback. Incluso también pueden realizarse otras actividades donde el colaborador se siente parte del proceso y no únicamente que es algo impuesto.
También es importante recordar que el sólo uso del uniforme no traerá todos estos beneficios, pero es parte de y puede ser considerado en una estrategia de marketing interno.
Si tiene más dudas y/o consultas, pueden dejar sus comentarios aquí en este post.
¡Hasta la próxima!